Reguant (CUP) critica la "gentrificación" de Sant Antoni y pide políticas de vivienda
Vecina de Sant Antoni, dijo que la remodelación del mercado del barrio es el ejemplo "de los efectos de la gentrificación en el centro de la ciudad".
La concejala de la CUP en Barcelona Eulàlia Reguant ha criticado este miércoles la "gentrificación" del barrio barcelonés de Sant Antoni y ha reivindicado la necesidad de políticas de vivienda, oponerse a los fondos buitre y apoyar a los vecinos organizados que luchan contra estos fondo.
En declaraciones a los medios antes de un mitin en el mercado de Sant Antoni, también ha destacado la importancia de las políticas de apoyo al comercio de proximidad frente a las grandes superficies y la pacificación de ciertas calles para recuperar espacio público para los vecinos, con centros cívicos y bibliotecas, además de apostar por el decrecimiento turístico y de frenar a los especuladores y fondos buitre.
Vecina de Sant Antoni, dijo que la remodelación de este mercado es el ejemplo "de los efectos de la gentrificación en el centro de la ciudad", y lamentó que en el barrio se ha producido un proceso de sustitución de los vecinos.
FONDO BUITRE
Lamentó que en este barrio hay "bloques de pisos resistiendo" los embates de los fondos buitre y desahucios invisibles de vecinos que han recibido burofaxes con incrementos del precio del alquiler de manera desorbitada.
Detalló que en los últimos meses ha habido más de 14 bloques "en lucha" contra fondo buitre, en un barrio en el que el 35% de su población ha llegado en los últimos cinco años, lo que responde movilidad de vecinos, a la presión inmobiliaria y al aumento del precio del alquiler ya la transformación del precio del mercado.
Criticó que también cerraron comercios históricos del barrio por culpa de la presión inmobiliaria y incrementos en el alquiler, en una gentrificación que después de 1992 vivió el barrio del Raval, que ahora vive Sant Antoni y que vivió el barrio de Gracia; y pronosticó que puede afectar en los próximos años en el Poblenou.
Ha llamado a transformar los mercados con remodelaciones que sean para los vecinos, que respeten los paradistas; y ha avisado del riesgo de que en Sant Antoni acabe como La Boquería.
Dijo que tras su reforma, el mercado de Sant Antoni está más enfocado a que los turistas vayan a comprar y paseen por dentro que no para comprar la comida: "El riesgo de que se convierta en eso está sobre la mesa".
Escribe tu comentario