Isabel Allende reconstruye el exilio a Chile de 2.000 republicanos españoles

El SS Winnipeg fue un paquebote francés construido en 1918 para carga y pasaje que en 1939, una vez finalizada la guerra civil española, fue utilizado para transportar a América desde Francia a alrededor de 2.000 exiliados republicanos españoles gracias a las gestiones realizadas por Pablo Neruda, nombrado cónsul a tal efecto por el presidente chileno Aguirre Cerda. El barco hizo la travesía hacia el Nuevo mundo las semanas previas al comienzo de la segunda guerra mundial y alcanzó América a finales de agosto y Valparaíso a principios de septiembre, desembarcando todos los pasajeros que seguidamente pidieron asilo bien en Chile, bien en Argentina o en otros países.

A partir de ese periplo, Isabel Allende reconstruye en 'Largo pétalo de mar' (Plaza&Janés) la peripecia vivida por Víctor Pey, quien habría emigrado en ese barco con Roser, viuda de su hermano Guillem, desaparecido al final de la guerra, y el hijo de ambos Marcel, después de haberse casado con ella para garantizar el viaje conjunto. Los tres se quedaron en Chile, el país que Alende describe como "una isla delimitada al norte por el más inhóspito desierto, al este por la impenetrable cordillera de los Andes, al oeste por el Océano Pacífico y al sur por el continente helado de la Antártida (y por ello) con razón los chilenos vivían examinándose el ombligo mientras más allá de sus fronteras corría el siglo XX al galope".

La autora describe el ambiente de un Chile con profundas diferencias sociales y económicas, una clase acomodada, selectiva, distante y segregada, una iglesia retrógrada y unas masas trabajadores que padecían flagrantes injusticias. En este ambiente, Víctor, que por su condición de estudiante de Medicina adquirió durante la guerra en el Hospital de Manresa una acreditada práctica quirúrgica, se graduó en su nueva patria y se acreditó rápidamente como un afamado cardiólogo, lo que le dio pie para relacionarse con miembros de la oligarquía local, como la familia del Solar, con la hija de la cual mantiene una corta, pero intensa relación sentimental. Pese a ello, no renunció a sus ideales de izquierdas, anudó una buena amistad con el doctor Allende --con el que compartía la afición al ajedrez-- y fue, por ello represaliado tras el golpe de estado militar que le destituyó.

'Largo pétalo de mar' es un retrato de la vida chilena, de la frustrada experiencia socializante emprendida por el presidente Allende y de la forma en que se produjo la progresiva integración de los exiliados españoles en su nueva patria, al punto de que Marcel se niega siempre a hablar en el catalán de sus padres y se considera exclusivamente chileno.

La autora dice al final que Víctor, el protagonista, fue un personaje real, pero que el conjunto de la obra escrita, pese a haberse inspirado en muchos hechos y personajes históricos, es en realidad una novela, lo que le da pie para crear personajes contradictorios o sugestivos, el mejor de todos, con gran diferencia, la criada de los del Solar, la nativa mapuche Juana Nangucheo, poseedora de todos los secretos de la familia y el miembro más entrañable y querido de ella, y para fabular --¿o no?-- incluso con la reaparición de personas perdidas como Carme, la madre de Víctor o Aitor, su salvador o para resolver la trama argumental desvelando un secreto que había quedado bien guardado.