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Las jornadas que siguieron a la sentencia del 'procés' fueron de una virulencia inusitada. De ahí que los cuerpos policiales planearan tomar medidas extraordinarias para contener la violencia en las calles.
Las jornadas que siguieron a la publicación de la sentencia del 'procés' fueron de una violencia inusitada que sorprendió a los propios cuerpos policiales. De ahí que los efectivos planearan tomar medidas extraordinarias para contener la violencia en las calles.
Entre ellas estaba un camión de agua que fue enviado desde Madrid para dar apoyo a los agentes que se enfrentaban a los CDR. Sin embargo, Interior vetó su uso en las calles de Barcelona, según publica 'El Confidencial Digital'.
Desde la Dirección General se apostó por trasladar a agentes de las Unidades de Prevención y Respuesta para dar apoyo a los efectivos de las Unidades de Intervención desplegados en Catalunya, pero en ningún momento se permitió sacar a la calle el camión de agua. Asimismo, también se impidió que la Guardia Civil viniera en ayuda de la Policía.
Si no se actuó fue porque el Ministerio quiso ahorrarse las imágenes problemáticas que se produjeron durante el referéndum ilegal de 2017. El miedo a que escenas de posibles excesos policiales o enfrentamientos graves contra los manifestantes generaran un clima de opinión adverso al Gobierno desaconsejó el uso de medios más contundentes para contener a los manifestantes.
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