Puigdemont y Rufián se enganchan en Twitter

Carles Puigdemont  y  Gabriel Rufián, tienen sonoros  encontronazos  y la nueva polémica se ha producido dos meses después de que el portavoz de ERC  acusase en público al entorno del 'expresident'  Puigdemont de estar jugando a James Bond. 

Este jueves Rufián le espetó un “No vaya tanto a Waterloo” desde la tribuna  a Jaume Asens, de los comunes, durante el debate sobre el espionaje de Pegasus. Algo que no pasó desapercibido para  Puigdemont que se sitió aludido por el comentario del republicano. 

Calres Puigdemont respondió desde su cuenta de Twitter a Rufían con un : "Ir a Waterloo a hacer política o hacer visitas personales solo molestaba a quienes nos quieren aislar y encarcelar. Veo que ahora también molesta a ERC. Lo siento. Sobre todo porque si la alternativa es ir tanto a Madrid, ya vemos sus resultados. Hoy mismo".

Y sus seguidores le han seguido con una propuesta contra Rufian :

GABRIEL RUFÍAN A JAUME ASENST: "¡YA BASTA DE ROMPER PUENTES CON ESQUERRA REPUBLICANA, YA BASTA!"

Jaume Asens cabe recordar que fue la persona que aconsejó a Carles Puigdemont a huir a Bélgica en octubre de 2017.  Jaume Asens, le ha reprochado a Rufían que relacionara a Podemos con el CatalanGate. En una dura réplica, Rufián ha recordado el apoyo que dio el exprimer ministro francés y concejal Manuel Valls a Ada Colau para que repitiera de alcaldesa de Barcelona. "Ya basta, Jaume, de romper puentes con ERC", ha indicado. Y, antes de abandonar la tribuna, es cuando ha pronunciado en tono despectivo: "¡Deja de ir tanto a Waterloo, anda!". La frase ha sido aplaudida ostensiblemente por los diputados de ERC y contestada con una sonrisa por Jaume Asens. 

ERC con sus 13 diputados republicanos, es el principal apoyo del Gobierno de coalición que encabeza Pedro Sánchez. Los de Puigdemont lo ven diferente. Pere Aragonès siempre ha intentado ser más diplomático. Rufían sin embargo reparte estopa a diestro y siniestro. Las elecciones municipales donde ERC tiene buenas encuestas hace que mantenga una tensa relación con los comunes quienes dejaron a Ernest Maragall con las ganas de retonar la alcaldía de Barcelona a las manos de los Maragall.