Trump impide la entrada a inmigrantes y refugiados de siete países musulmanes
La orden ejecutiva firmada por Trump suspende el plan de acogida de refugiados sirios así como la entrada en EEUU de migrantes de Siria, Yemen, Sudán, Somalia, Irak, el Irán y Libia por un plazo de 90 días.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha suspendido el plan de acogida de refugiados sirios por un tiempo indefinido, en el marco de la nueva orden ejecutiva firmada este viernes destinada a impedir que los terroristas islámicos pisen suelo de Estados Unidos.
Según publica la cadena 'ABC', el texto firmado por Trump llama a la suspensión inmediata de la migración de países con alguna vinculación con el terrorismo islámico, como Siria, Yemen, Sudán, Somalia, Irak, Irán y Libia por un plazo de 90 días.
Además, el programa de acogida de refugiados ha sido suspendido por un plazo de 120 días para que las autoridades norteamericanas revisen las solicitudes y el proceso de adjudicación de asilo.
En el caso de Siria, la orden suspende indefinidamente la entrada de cualquier ciudadano sirio como refugiado al entender que "va en detrimento de los intereses de los Estados Unidos".
Así, tal como especifica el documento, se limita a 50.000 el número de refugiados que acogerá Washington en 2017, al entender que un número superior es igualmente "perjudicial" para el país. El año pasado, la administración Obama ha admitido a 85.000 refugiados, de los cuales 12.000 provenían de Siria.
"MEDIDAS DE VETO" A TERRORISTAS
Esta serie de novedades en la política migratoria se enmarcan en las "medidas de veto" impulsadas por Trump para impedir que terroristas islámicos entren al país norteamericano.
"He establecido nuevas medidas de veto para mantener a los terroristas islámicos fuera de los Estados Unidos. No los queremos aquí", ha dicho en una rueda de prensa que ha ofrecido desde el Pentágono con motivo de la toma de posesión del secretario de Defensa, James Mattis.
El mandatario estadounidense ha señalado que las acciones políticas irán emparejadas a las acciones militares.
"Queremos asegurarnos que no dejamos entrar a los que amenazan a los soldados que están luchando en el extranjero", ha afirmado, y a la vez ha justificado la entrada en los Estados Unidos a los "que apoyen en nuestro país y estimen profundamente a su pueblo".
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