Este popular alimento puede aumentar un 20% el riesgo de sufrir diabetes

Un nuevo estudio de Harvard ha encendido las alarmas entre los expertos en nutrición: ciertos hábitos alimentarios muy habituales podrían aumentar el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Entre los alimentos implicados, la patata es uno de los más destacados, especialmente según su forma de preparación.

Los investigadores, liderados por el postdoctor Seyed Mohammad Mousavi, explican que no todas las patatas tienen el mismo efecto: fritas o en puré con mantequilla y crema se relacionan con un aumento del riesgo de diabetes, mientras que las patatas hervidas no presentan este peligro. Sustituir las patatas más procesadas por cereales integrales puede reducir el riesgo hasta un 19 %, y cambiarlas por cereales refinados como el pan blanco también ofrece un pequeño beneficio.

El mensaje es claro: pequeños ajustes en la dieta diaria pueden tener un impacto muy significativo. La elección de cómo cocinar la patata es clave para proteger la salud. Las patatas contienen antioxidantes naturales como flavonoides, carotenoides y ácidos fenólicos, que ayudan a combatir enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer. Además, el almidón resistente favorece la flora intestinal y el control del azúcar en sangre.

Los especialistas coinciden en que la clave está en preparaciones saludables: hervidas, al horno o a la plancha, y mantener la piel siempre que sea posible. Caroline Susie, nutricionista registrada, advierte que muchas veces la patata se desvirtúa: frita, con mantequilla o crema, o combinada con ingredientes poco saludables.

Otros estudios recientes, incluido uno realizado en Australia, también señalan que la patata en ciertas preparaciones aumenta el riesgo de diabetes. La conclusión es clara: la forma de cocinar y la combinación con otros ingredientes pueden convertir una patata saludable en un riesgo para la salud.