La organización procede de los Balcanes y la operación se ha saldado con 32 detenidos y 102 armas intervenidas.
Las detenciones no se han hecho esperar tras el fallido golpe de Estado en Turquía como parte de una “limpieza hasta que no quede mancha” en las Fuerzas Armadas. 2.839 oficiales y soldados fueron detenidos y más de 2.700 jueces y fiscales serán suspendidos de sus funciones.