Esta postura marca una clara advertencia a su aliado clave, Netanyahu, con quien tiene prevista una reunión este lunes.
De esta manera, el debate, que comenzó con un tema tan grave como un conflicto internacional, revela las tensiones internas.
La situación es tan crítica que las propias organizaciones humanitarias "están siendo testigos de cómo sus propios compañeros y socios se consumen ante sus ojos".
El inquilino de la Casa Blanca baraja enviar tropas
Más de 2 millones de personas dependen de estos suministros esenciales