Una asociación puso en conocimiento del fiscal unas afirmaciones que aseguran que son de "alto contenido islamófobo" en un mitin en Valencia.
Le condenan a un año de cárcel y una multa de 2.160 euros por un delito relativo al ejercicio de los derechos fundamentales y de las libertades públicas.
El dirigente popular ha defendido que los musulmanes, "además de derechos, tiene obligaciones y deben cumplir la ley e integrarse, así como respetar las costumbres del país que les acoge".
Los musulmanes confían en que la mayoría de españoles "no caerán en la trampa" de quienes relacionan el Islam con estos atentados y recuerdan a quienes han promovido el hashtag que la incitación al odio es delito.