La tonadillera tendrá que sentarse el próximo 22 de marzo en el Juzgado número 5 de lo penal de Málaga, acusada de un presunto delito de insolvencia punible.
Las sospechas de Irene se basarían en un presunto mal uso que Kiko estaría haciendo del dinero familiar: "Cuentan que hace unos días le dio 50 euros para echar gasolina y la bronca fue brutal cuando descubrió que la aguja del depósito ni se había movido". Las adicciones de Kiko Rivera, habrían llevado a su esposa Irene a controlar los gastos de su marido hasta el extremo: "Es ella la que le da diez euros para que vaya a desayunar con sus amigos o dos euros para que se tome un café".
Tras el programa, la hija de Isabel Pantoja ponía rumbo al despacho de sus abogados, de donde salía completamente 'descompuesta' horas después, sin confirmar ni desmentir si había decidido demandar a Kiko
Esta mañana nos quedábamos a cuadros cuando leíamos la entrevista que Kiko Rivera ha dado para la revista Lecturas porque sin venir a cuento arremetía contra su madre y su hermana, detallando hechos y relatando sentimientos que atentan contra la intimidad de su familia y contra el honor de Isa Pantoja...
Kiko ha contado en dicha revista que un día le llamó su madre para que acudiese a Cantora porque su hermana Isa estaba metida y encerrada en el cuarto de baño amenazando con cortarse las venas.
Alejado del foco mediático pero muy pendiente de las redes sociales, Kiko Rivera vuelve a recurrir a ellas para mandarle un mensaje muy claro a su hermana Isa Pantoja. Con un acercamiento familiar cada día más lejos, el Dj sigue manteniendo su versión en el enfrentamiento con Isa sin que nada le haga cambiar de opinión.
Si este lunes Kiko Rivera cargaba duramente contra Isa Pantoja en Instagram dejándole claro que su familia son solo Irene Rosales y sus hijos y llamándola "señorita" le pedía que les dejase en paz, ahora el Dj ha querido marcar distancias de nuevo con su hermana puntualizando una cosa sobre el cumpleaños de su hija Ana y tendiendo inesperadamente la mano a su prima Anabel Pantoja.
Kiko, por su parte, ha reaccionado con total indiferencia, asegurando ante nuestros micrófonos en exclusiva que no tiene relación con su madre ni piensa tenerla a pesar del delicado momento por el que atraviesa.
Ha aparecido en 'Sábado Deluxe' para hablar sobre toda la actualidad que le rodea.
Y es que a pesar de que ambos quedaron en reunirse para solucionar las cosas entre ellos en su emotivo y lacrimógeno reencuentro tras la muerte de doña Ana, la tonadillera continúa enfadada con su hijo e, incapaz de olvidar todas las barbaridades que ha dicho sobre ella en el último año y el escarnio público al que la ha sometido, le ha cerrado por el momento las puertas de su casa.
Kiko Rivera declaraba en una entrevista que su hermana Isa Pantoja y su prima Anabel "no tienen ni oificio ni beneficio" y que "lo único que saben es ir a programas de televisión a dar exclusivas".
Harta de estos y otros ataques, Isa Pantoja a respondido.
Kiko Rivera la ha dejado de seguir en las redes sociales.
El fallecimiento de doña Ana en la madrugada de este martes pillaba a Kiko Rivera en la isla de La Graciosa para acudir a la boda de su prima Anabel Pantoja. "Perdido" y "sin saber qué hacer", el Dj decidía finalmente poner rumbo a Sevilla y hacer caso a su corazón pues, en un momento tan duro para toda la familia, era el momento de aparcar su guerra contra su madre, Isabel Pantoja.
Completamente destrozado, Kiko ha sido el primer miembro de la familia en reaccionar públicamente a la muerte de su abuela - a quien estaba muy unido y a la que no veía desde que estalló la guerra contra Isabel Pantoja hace un año - despidiéndose de su 'yaya' con un emotivo texto en sus redes sociales.
Una infidelidad que podría dar al traste con su matrimonio, ya que en su día Irene dejó claro que no perdonaría "ni una más" a un Kiko que, por su parte, ha negado la mayor, apuntando a que sería uno de sus amigos el que roneó con una chica durante su concierto.
Mucho se ha hablado en este último mes sobre la boda de Anabel Pantoja y no solamente de la polémica que ha habido con los ecologistas porque se vaya a llevar a cabo en La Graciosa, sino por los invitados que asistirán a dicha celebración
"Comienza una nueva vida y ahora toca cuidarse al cien por cien".
Una contundente respuesta con la que Kiko hace borrón y cuenta nueva, demostrando que a pesar de que su madre tenga intenciones de desheredarlo, a él ya no le importa y, ahora sí, se centrará en su vida y en su trabajo, cada vez más alejado de la tonadillera.
Cargado de bolsas con sorpresas para Irene y bastante más animado que en su última aparición pública Kiko ha llegado a casa sin ganas de hablar sobre su conflicto con Anabel.
Así lo dijo a sus compañeros en Honduras, donde se encuentra participando en Supervivientes.