Amén de las disputas políticas, estos cinco años han traído un poco más de tranquilidad en una sociedad dividida
Un lustro después, el tablero político en Catalunya es totalmente diferente.
Independentistas y comuns han evitado que Rafael Ribó tenga que dar explicaciones por no haber actuado cuando en septiembre de 2017 el Parlament aprobó las leyes de desconexión.
Piden que se vuelvan a aprobar normativas como la de pobreza energética, la emergencia habitacional y la ley de impuesto a los bancos.
Al interpretar que no se excluye la posibilidad de que los grupos parlamentarios presentasen enmiendas.
Los doce magistrados del Pleno del TC han acordado por unanimidad mantener la suspsensión durante cinco meses de la reforma que daba vía libre al Govern a aprobar la ley del referéndum por lectura única.
El portavoz de SiQueEsPot, Joan Coscubiela, recuerdan a los independentistas que "lo que se proponen hacer el 1 de octubre no es un referéndum ni nada que se le parezca".
Alejandro Fernández (PP) ha definido la reforma del reglamento del Parlament como "un espectáculo dantesco, una estratégica lunática y una astucia cutre y veraniega".
El Parlament ha dado luz verde a la reforma del reglamento de la Cámara. Roger Torrent ha amenazado con que harán "lo que haga falta para poner las urnas". La oposición tacha la votación de "cacicada", "atropello" y "espectáculo dantesco".
Los socialistas recuerdan que el Consell de Garanties Estatutaries dictaminó que el mecanismo de lectura única se debe reservar a casos cuya "simplicidad" y consenso lo permitan, algo que no ocurre en las leyes de 'desconexión.
La diputada Anna Gabriel ha recordado que en el Parlament "no hay tradición de que se tramite por lectura única a instancia de un grupo parlamentario" este tipo de iniciativas.
El fallo declara la nulidad del acuerdo de la Mesa del Parlament sobre la creación de esas ponencias con las que JxSí y la CUP pretenden avanzar hacia la hipotética independencia de Catalunya.