Con la imposición de la globalización, los monopolios parecen haber entrado en el campo de lo inaceptable, debido justamente a que los perjudicados son los consumidores.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia critica además de que distorsiona la competencia y solicita que los estancos no tengan el monopolio.
La Comisión Nacional del Mercado de la Competencia advierte de que la reducción de bancos en el mercado español conduce a una subida de precios, tal y como sucedió en el sector de las telecomunicaciones.