Cuarenta años después del nacimiento de Louise Brown en 1978, la primera 'bebé probeta' del mundo, más de 8 millones de niños han nacido por fecundación in vitro y otros tratamientos avanzados de fertilidad en el mundo.
El Gobierno ha detallado que se recuperará a través de una Orden Ministerial, y que se prevé su implantación durante "el primer trimestre de 2019".
La edad de las pacientes ha pasado de 35 años de media en 1995 a 39 años en 2016. A partir de los 40 años la probabilidad de embarazo es más baja porque se producen menos óvulos y el 50% son anormales cromosómicamente.