Urtasun avanza con Junts y abre la puerta a una reunión con Puigdemont para la jornada laboral

El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha señalado que los contactos con Junts están dando frutos en la negociación para la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales. Según ha subrayado, “se avanza con Junts para que dé su apoyo a la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales y esperamos poder lograrlo lo antes posible”.

Urtasun ha explicado que, pese a que la primera idea era celebrar el debate de totalidad antes del parón estival, finalmente se aplazó por no tener garantizado el apoyo de los siete diputados de Junts, quienes, junto a PP y Vox, han presentado enmiendas para devolver el proyecto al Ministerio de Trabajo. “Seguimos hablando con Junts de forma intensa. El Ministerio de Trabajo, que es quien pilota estas negociaciones, ha seguido en contacto, y nosotros estamos convencidos de que lo vamos a conseguir”, ha insistido.

En cuanto a la posibilidad de que la vicepresidenta Yolanda Díaz viaje a Bélgica para entrevistarse con Carles Puigdemont y cerrar el acuerdo, Urtasun no descarta la opción: “Nosotros nunca le ponemos pegas a reuniones, no tenemos ningún problema con hablar, reunirnos, con todo el mundo porque el diálogo siempre es positivo”. Cabe recordar que Díaz ya viajó a Bruselas en 2023 en el marco de las negociaciones para la investidura.

Ajustes para pequeñas y medianas empresas

Urtasun ha reconocido que Junts tiene “sus reivindicaciones legítimas” respecto a la aplicación del recorte de jornada a las pymes, y que el Ministerio de Trabajo “las está terminando de encajar”. El objetivo es lograr un equilibrio que permita proteger a las empresas sin renunciar al beneficio de los trabajadores.

El ministro ha defendido la medida destacando ejemplos internacionales: “Está teniendo éxito en países como Holanda, donde están avanzando ya de forma efectiva hacia la jornada de cuatro días sin que haya tenido ninguna implicación negativa ni en la productividad ni en el crecimiento de la economía”. Además, ha señalado que “trabajar más horas no significa ni ser más productivos ni producir más”.

Urtasun también ha resaltado el amplio respaldo social: “No es que tenga un apoyo muy grande en Catalunya que también, porque hay dos millones de trabajadores y trabajadoras que se verán beneficiados, sino incluso las encuestas demuestran que entre los electores de Junts hay un gran apoyo”.

Presupuestos 2026: ambición y prioridad en vivienda

El portavoz de Sumar ha insistido en la necesidad de aprobar unos nuevos Presupuestos para 2026: “El año pasado no estuvimos de acuerdo en renunciar a hacer las cuentas y volvimos a pedir que se hagan este año”.

Para Urtasun, no se trata solo de una obligación legal, sino de un instrumento para “dibujar una ambición por parte del Gobierno y una idea de país”. Por ello ha reclamado al PSOE unidad en la elaboración de los Presupuestos: “Le quiero pedir al PSOE que hagamos las cuentas públicas más ambiciosas posibles, juntos, con una prioridad que es la vivienda, el principal problema que afecta a nuestro país”.

Respecto a la posibilidad de que el Congreso no apruebe las cuentas, el ministro ha reconocido que “al país le vendrían mejor unas cuentas nuevas”, pero también ha recordado que el Ejecutivo puede seguir funcionando con las cuentas prorrogadas: “Yo tengo mi presupuesto en el Ministerio de Cultura y estoy sacando iniciativas nuevas con los Presupuestos prorrogados. Afortunadamente, como los últimos prorrogados fueron bastante expansivos, hay recursos para hacer cosas. Es decir, que es verdad que podemos gobernar con unas cuentas prorrogadas”.

Financiación autonómica y fiscalidad

Urtasun ha abordado también la cuestión de la financiación singular para Catalunya, defendida por ERC como condición para negociar las cuentas. Según el ministro, esta cuestión debe abordarse conjuntamente con la reforma de la financiación autonómica: “Hay que actualizar el sistema para financiar bien todas las comunidades autónomas. Valencia, por ejemplo, es un territorio particularmente castigado que hay que mejorar, pero también Aragón”.

Asimismo, ha enfatizado que la singularidad catalana está recogida en su Estatut y que no es una invención del Gobierno actual. Urtasun ha advertido de prácticas fiscales problemáticas en otras regiones, en referencia a la Comunidad de Madrid: “Nos hace ‘dumping’ a todos y luego nos pide más recursos para financiarse. Este tipo de situaciones no son posibles. Y por lo tanto, la mejora del sistema de financiación, desde nuestro punto de vista, tiene que ir vinculado a un suelo fiscal para que nadie haga 'dumping' como nos hace la señora Ayuso al resto de comunidades autónomas”.

Diálogo político y retos en el Congreso

El ministro reconoce la dificultad de sacar adelante reformas en esta legislatura: “Nada es fácil en el Congreso esta legislatura. En diciembre todo el mundo nos decía que esa ecuación era imposible y al final sacamos adelante una reforma fiscal”.

Urtasun recuerda que la experiencia previa demuestra que es posible conciliar intereses de Junts, Sumar y otros socios para lograr avances legislativos: “Aunque con sus déficits, porque quedaron cosas pendientes, como la fiscalidad del diésel, que es una cosa que tendremos que retomar”.

En definitiva, el Gobierno apuesta por combinar diálogo, pragmatismo y consenso para garantizar tanto la reducción de la jornada laboral como la aprobación de nuevas cuentas y la mejora de la financiación autonómica.