Can Pujol ofrece una experiencia única con un recorrido de más de tres hectáreas, actividades familiares, aventuras nocturnas y sesiones de miedo bajo las estrellas
En el Baix Empordà, concretamente en Serra de Daró, un campo de maíz ha dejado de ser solo un espacio agrícola para convertir en una actividad de ocio imprescindible durante el verano.