La parte sur de la península de Kamchatka, en Rusia, se ha desplazado casi dos metros hacia el sureste a causa de un terremoto, según un cálculo preliminar basado en observaciones geodinámicas.
Este suceso nos obliga a mirar hacia el pasado, a tragedias silenciadas como el devastador tsunami de Severo-Kurilsk de 1952, y a plantearnos una pregunta crucial para nuestro futuro global.