El exministro de Interior señala a Roures como artífice de una trama para hacerle caer
El exministro recuerda que Roures intentó vincularlo con las "cloacas del Estado" a través de un documental que "fue emitido repetidas veces y siempre en horario de máxima audiencia por TV3".
El exministro de Interior Jorge Fernández Díaz considera que el magnate de la comunicación Jaume Roures fue el "primer ariete" de una "compleja estrategia" para hundir su figura pública a raíz de la 'Operación Catalunya'.
Estas palabras se encuentran en las memorias del exministro, tituladas 'Cada día tiene su afán' (Ediciones Península), donde Fernández Díaz realiza un particular ajuste de cuentas con el fundador de Mediapro. El exministro señala que Roures intentó vincularlo con las "cloacas del Estado" a través de un documental producido por su empresa y que "fue emitido repetidas veces y siempre en horario de máxima audiencia por TV3".
"Para mis detractores, debía quedar acreditado que existía una ‘Operación Cataluña’, cuyo objeto sería denigrar e incriminar, incluso imputar, al independentismo catalán desde las llamadas ‘cloacas del Estado’. Debo decir que tal contraoperación la ejecutaron con una profesionalidad que sería admirable si no fuera antes detestable. Una profesionalidad que, en todo caso, no la hace veraz", asegura en el libro.
¿QUIÉN FILTRÓ LAS GRABACIONES?
El exministro agrega que fue Eugenio Pino quien "dio" las cintas al comisario principal Marcelino Martín-Blas -quien en aquel momento era el jefe de la Unidad de Asuntos Internos de la Policía- para que "hiciera la transcripción y el análisis con finalidad operativa" y cuenta que no sabe "por qué vericuetos" las grabaciones llegaron a Público, el diario que las dio a conocer en vísperas de los comicios generales de junio de 2016. Aquí el ministro vuelve a ver la sombra alargada de Roures.
"Tras aquellas dos conversaciones, yo me olvidé del tema. He de mencionar también que, si hubiera tenido alguna preocupación al respecto, de entrada ya no se hubieran producido las grabaciones [que en otra parte del libro se reafirma en que fueron manipuladas], pero, en todo caso, de haber existido, habría ordenado que las cintas máster me las dieran a mí", revela en el libro.
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