Pese a las dos reuniones a tres bandas con BCASA y la empresa concesionaria FCC, el diálogo no ha logrado avances.
Tras el inicio de la huelga indefinida de los socorristas , las playas de Barcelona vivieron su primera prueba de fuego: un fin de semana completo sin todo su personal y con la bandera amarilla.
En declaraciones, se ha preguntado por qué el Ayuntamiento solo los considera un servicio esencial "cuando hacemos huelga", criticando la falta de personal debido a la alta temporalidad de la plantilla.