El colectivo vincula el aprendizaje de la lengua con el activismo por el derecho a la vivienda, en un contexto marcado por la precariedad y la falta de acceso al alquiler
Esta iniciativa ha sido duramente criticada por sectores defensores de los derechos humanos, quienes la consideran una violación flagrante de principios éticos y legales fundamentales
Junto con otras 3 comunidades, aglutinan cerca del 70% de los inmigrantes que viven en España
En Catalunya el aumento poblacional ha sido de un 0,23%